UKGC introduce una controvertida prohibición de los juegos de azar en línea para los pensionistas mayores de 65 años

Por Dave Sawyer, Última actualización 31 de marzo de 2024

En una medida que está suscitando un debate generalizado, la Comisión de Juegos de Azar del Reino Unido (UKGC) ha establecido la ley: a partir del 1 de mayo, si eres un pensionado de 65 años o más, las puertas del juego online estarán oficialmente cerradas para ti. En cambio, sus actividades de apuestas se limitan al mundo tangible de las tiendas de apuestas físicas. He aquí un breve resumen de por qué esta decisión está causando tanto revuelo:

• Protegiendo a los ancianos: El UKGC sostiene que este paso audaz protegerá a las personas mayores de las trampas de la adicción al juego en línea y la explotación financiera, directamente desde sus salas de estar.
• ¿Una libertad demasiado lejana?: Los críticos critican la prohibición como una extralimitación que ataca la libertad personal y señala injustamente a las personas mayores.
• Comunidad y conveniencia en juego: Para muchos jubilados, el juego en línea no se trata sólo de la emoción de ganar; es una comunidad digital y una práctica actividad de ocio que ahora están siendo eliminadas.
• Adaptación de espacios físicos: Las casas de apuestas se están preparando para su nueva clientela con ajustes orientados a las personas mayores, pero ¿será suficiente para compensar la pérdida de acceso online?

El razonamiento del UKGC es claro: salvaguardar a los miembros vulnerables de la sociedad es una prioridad. Pero, ¿es este enfoque un instrumento demasiado contundente, que socava las libertades personales y las conexiones sociales junto con riesgos potenciales? Los críticos, incluidos jubilados y expertos de la industria, argumentan que la prohibición es una política injustificada y discriminatoria que subestima la agencia de las personas mayores y los aspectos positivos del juego en línea como forma de entretenimiento e interacción social.

Margaret Thompson, de 72 años, expresa un sentimiento común entre sus compañeros: "El bingo en línea era más que un juego; era donde me encontraba con amigos, donde compartíamos risas e historias. Esta prohibición no sólo nos quita la diversión; nos despoja de nuestra comunidad."

El UKGC insiste en que está preparado para trabajar con las casas de apuestas para facilitar la transición de esta nueva ola de clientes, prometiendo ajustes que favorezcan a los pensionistas. Sin embargo, a medida que se acerca el día D, muchas preguntas siguen sin respuesta. ¿Cómo se hará cumplir esta prohibición? ¿Qué impacto tendrá en la vibrante escena del juego en línea del Reino Unido y en la vida diaria de innumerables personas mayores?

Bryan Bailey, director de Casinomeister, resume la frustración con una mezcla de humor y conmoción: "Inventar Internet fue el regalo de nuestra generación al mundo. ¿Y ahora nos dicen que no podemos disfrutar los frutos de nuestro trabajo? No se trata sólo del dinero; se trata de nuestro derecho a elegir cómo gastamos nuestro tiempo y recursos"

Mientras nos acercamos al 1 de mayo, los efectos de esta controvertida política aún no se han materializado plenamente. ¿Será una medida de protección para un grupo vulnerable o terminará aislando e incomodando a muchos que veían el mundo digital como la última frontera de la libertad? El tiempo, como siempre, lo dirá.